Dentro del universo Lean, los eventos kaizen son una herramienta esencial, extremadamente útil para el desarrollo de una cultura de la mejora continua en el seno de las organizaciones.
Kaizen es el término japonés para referirse a la mejora continua. Esta filosofía se basa en la suma de pequeños cambios acumulables en el tiempo con el propósito último mejorar los parámetros de seguridad, calidad, el servicio y eficiencia a largo plazo. Pero kaizen también significa la implicación de todo el personal en la mejora, desde dirección hasta los operarios/as.
Los talleres kaizen se utilizan para atajar problemas concretos en un área definida de la planta o en oficinas, generalmente durante tres y cinco días. En ese periodo de tiempo, los resultados son visibles e inmediatos.
Para su puesta en marcha, se crea un grupo de trabajo multidisciplinar formado fundamentalmente por los operarios/as implicados en el proceso junto a responsables de área y personal de los departamentos soporte, como calidad, mantenimiento o prevención. El equipo está capitaneado por un persona que se encargará de llevar el taller a buen término.
Kaizen: filosofía enfocada en la mejora continua,
en pequeños incrementos, a todos los niveles
y de manera permanente
Esta metodología ayuda a los participantes a centrarse en lo que es realmente importante, la búsqueda de las fuentes de despilfarro. Durante el evento, el equipo formula una serie de acciones de mejora que se implantan en el momento. El resto de actuaciones se recogen en un plan de acción para su posterior ejecución.
Este formato de taller es válido para cualquier sector, tipo de proceso y área de la empresa, siempre que su objetivo sea conseguir una mejora dentro del alcance de los participantes.
La temática en este tipo de talleres es muy variada. Desde organizar el lugar de trabajo con las 5S a desarrollar un sistema pull, pasando por un taller para mejorar los tiempos de cambio de formato con SMED, a crear una célula de trabajo o implementar un nuevo lay out.
En la sección de experiencia de esta web podéis encontrar diferente ejemplos de talleres kaizen realizados en empresas industriales, de agroalimentación o servicios.
Pasos para organizar un taller kaizen
Como apuntamos arriba, una de las características de un evento kaizen es su brevedad. No obstante, si queremos asegurar su efectividad, es importante realizar una buena preparación antes del taller, y una vez terminado, realizar un seguimiento del proyecto.
Por ejemplo, la metodología que usamos en ACMP engloba:
- Una primera etapa en las semanas previas donde se concreta la mejora que se va a ejecutar. Generalmente, ésta se define a partir de los resultados obtenidos en un mapa de valor (VSM) con el que se determinan las áreas de mejora y su prioridad.
- Durante esta fase se establecen los objetivos del proyecto, el momento más apropiado para ejecutarlo, los recursos necesarios y el equipo de trabajo.
- El proyecto se sintetiza en un documento chárter en el que se recogen todos estos aspectos, junto con los indicadores que miden sus resultados.
- Compilación de datos relativos al proceso sobre el que se va a actuar.
- Aprovisionamiento de los materiales necesarios para la realización de la actividad
- Por último, en esta etapa se realiza una comunicación previa a los personas de la organización acerca de la iniciativa.
- El desarrollo del taller propiamente dicho consta de cinco etapas y su duración se fija en función de la naturaleza y envergadura del proyecto.
- Concluido el taller, las semanas siguientes la tarea se centra en continuar con la puesta en marcha de las mejoras identificadas en el taller y hacer un seguimiento de los resultados.
En el siguiente artículo explicaremos las pautas que seguimos en ACMP para la gestión de los talleres de mejora, ilustrado con diferentes experiencias reales y algunas recomendaciones que os sirvan de ayuda en vuestros proyectos.
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